El Boletín Oficial de Castilla y León ha publicado hoy la resolución de la Dirección General de Producción Agropecuaria e Infraestructuras Agrarias, por la que se limita a 950 hectáreas las nuevas plantaciones para este año en el territorio de Ribera de Duero.
Se trata de un resultado que responde a la recomendación realizada por el propio Consejo Regulador de esta denominación de origen que ahora se convierte en normativa. Una petición que se basaba en un estudio realizado por el propio Consejo y en ciertos documentos de apoyo de la Asociación de Viticultores Ribera de Duero, las Organizaciones Profesionales agrarias ASAJA Burgos, Alianza UPA-COAG, Unión de Campesinos UCCL Burgos, Unión Regional de Cooperativas Agrarias de Castilla y León (URCACYL) y ASEBOR.
Según el estudio elaborado se avala que con la limitación de 950 hectáreas nuevas de viñedo para 2018 la comarca vitícola puede tener una expansión ordenada de las plantaciones de viñedo y continuar creciendo en ventas de vinos sin generar fuertes oscilaciones de los precios teniendo en cuenta la calidad de los vinos y poder así evitar los posibles riegos de oferta excesiva de vino. Para ello en este estudio se incluye la evolución del ratio existencias/salidas de vinos en el período 2008-2016, índice que se ha situado entre el mínimo de 2,31 y el máximo de 3,10, con una media de 2,61. También se ha valorado que la entrega de contraetiquetas en el período 2008-2016 ha crecido un 3,2% anualmente debido al incremento de ventas tanto a nivel nacional como en las exportaciones.
Imagen: Consejo Regulador DO Ribera del Duero