Como garante de su regulación, desarrollo y protección
Tanto los diputados europeos, como los ministros de Agricultura han sido receptivos a las peticiones de las denominaciones de origen. Y es que, para las DDOO europeas, la PAC proporciona y garantiza herramientas muy importantes, caso de la regulación, definición, desarrollo y protección normativa del propio concepto D.O., de los planes de apoyo al sector del vino (que formarán parte de los futuros planes estratégicos) y del sistema de autorizaciones para plantaciones de viñedo, que permite controlar y planificar el crecimiento del potencial productivo año a año, para adecuarlo a la demanda, así como también de las medidas de desarrollo rural.
Tanto la Eurocámara como el Consejo han aprobado en sus posiciones respectivas para la nueva PAC desarrollos importantes para el futuro del sector y en particular del vino con denominación de origen en todos esos ámbitos, recogiendo peticiones de las organizaciones representativas de las denominaciones de origen: así, se apuesta desde ambas instituciones por la prolongación del sistema de autorizaciones de plantaciones de viñedo más allá de 2030, por una mejor y mayor protección para los derechos de propiedad intelectual de las DDOO (se mejora esta protección en ámbitos como el de su uso como ingredientes, su circulación en tránsito o el ámbito online), por una mayor y más moderna información al consumidor, con un marco específico para el etiquetado nutricional y de ingredientes adecuado a las necesidades del sector del vino, por la posibilidad de que las denominaciones de origen puedan experimentar con variedades híbridas con el fin de estudiar su resistencia y adaptación a los efectos del cambio climático.
Las negociaciones para la nueva PAC aún no han finalizado. Ahora, es el turno de las reuniones en los llamados trílogos, negociaciones entre la Comisión, el Consejo y el Parlamente, que se desarrollarán en lo que resta de año y principios de 2021, previéndose un acuerdo final para el primer trimestre de 2021.
Respuestas a las necesidades del sector agrario
Por su parte, el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ha explicado a las organizaciones agrarias ASAJA, COAG y UPA, que el acuerdo recoge los objetivos planteados por el Gobierno para desarrollar en España una PAC capaz de dar respuestas a las necesidades del sector agrario.
Y es que el acuerdo permitirá orientar la estrategia agraria nacional hacia las necesidades y prioridades del sector, que contará con un presupuesto de 47.724 millones de euros para 2021-2027, más las aportaciones del Estado, de las comunidades autónomas y de los planes de recuperación, con las que se acercará a los 53.000 millones.
Planas ha remarcado que esta nueva PAC supone un cambio profundo con respecto a la PAC actual, por su fuerte componente medioambiental, el 40 % del gasto de esta política se destinará a la mitigación de los efectos del cambio climático. Además, por primera vez, los Estados miembros podrán elaborar su propio plan estratégico nacional, adaptado a su realidad agraria, sin las rigideces que supone un modelo de talla única a nivel europeo y en el que se incardina la denominada “arquitectura verde”. También la próxima PAC contemplará la perspectiva de género en su política y dará un mayor protagonismo a los jóvenes a través de la obligación de destinar al menos el 2 % de los fondos a estos.
Por su parte, las organizaciones agrarias difieren sobre el acuerdo, mientras que en ASAJA no están tan convencidos de que sean tales los beneficios, COAG plantea su preocupación porque los ecoesquemas pueden llevar a que se pierdan ayudas a los productores. Unión de Uniones lo tacha de “descafeinado” y la única que lo valora en positivo es UPA al entender que será más justa y orientada a jóvenes y pequeños agricultores.