Caen las importaciones españolas de vino en términos de volumen en 2017 (-9%) pero aumentan un 5,4% en valor, al crecer el precio medio un 15,9%. Esto se explica, señalan desde el Observatorio Español del Mercado del Vino, por la caída de las compras de vino a granel, mientras crecen las importaciones de vinos con DOP envasados.
Los datos señalan que España importa, sobre todo, aromatizados de Italia y espumosos italianos y franceses. Italia es el principal proveedor en términos de volumen y Francia lo es en términos de valor.
El saldo comercial del vino en España en 2017 es netamente favorable, alcanzando los 2.670 millones de euros, lo que supone una notable contribución del sector a la balanza comercial nacional.